*Veracruzana por adopción, tras un accidente laboral que la dejó cuadripléjica, la joven mujer aceptó el diagnóstico, pero creó su pronóstico: hoy cuenta con una cosecha de cuatro medallas para natación en los Juegos Paralímpicos
Katya López Cedillo
Veracruz, Ver.- Nelly ha vuelto a nacer tres veces. Quizá llegó al mundo en Puebla, pero su vida, su adversidad, su lucha y su gloria se han escrito entre radiantes brazadas de esfuerzo, bajo la alberca del Complejo Acuático ‘Leyes de Reforma’, en el puerto de Veracruz, hasta cosechar cuatro medallas en la natación de los Juegos Paralímpicos.
“Yo creo que en mi otra vida fui gato…pero ya me gasté varias vidas”, bromea Nelly Miranda, quien el pasado 2 de agosto cumplió 51 años de edad.
“No nací con discapacidad. Cuando tenía 28 años tuve un accidente laboral: caí de 17 escalones y mi tronco giró de lado contrario de mis piernas que se enredaron en el barandal, tuve un derrame cerebral y después una amnesia por varios días”, relata la para nadadora.
Esa fue la primera vez que su vida, en un segundo, tornó hacia rumbos que nunca hubiera imaginado.
El diagnóstico era cuadriplejia. No recordaba a su mamá ni a su hijo de 4 años de edad, pero tampoco podía sentir su cuerpo desde el tronco hasta los pies. Los médicos auguraban una endeble calidad de vida para ella.
“Parecía como si me hubiera quedado como de 5 años de edad: no sabía que era una mano, y tenían que hacer todo por mi”, recordó la veracruzana por elección, que aceptaría el diagnóstico, pero crearía su pronóstico.
Mientras para otros la vida y sus rutinas ven con trivialidad el funcionamiento involuntario del corazón, caminar o tomar café, para Nelly la primer gran victoria de esta nueva e inesperada vida fue algo que para otros sería ínfimo: logró mover una mano.
“Todo fue gracias a la natación. Cuando me empiezan a dar terapias el dueño de la alberca preguntó si alguien quería atender a una persona con cuadriplegia y hubo un valiente: Samuel Vargas fue mi entrenador y Liz Barragán que era triatleta fue mi terapeuta. Cuando logré mover la mano en la alberca, el entrenador me decía que podía ser campeona nacional. “Así que cuando empecé a mover los dos brazos, sabía que ya estaba ‘del otro lado’ y ¡empecé a nadar”.
La vida de Nelly encontró un nuevo destino: tras aprender a nadar con una nueva condición, todos en su equipo decidieron registrarla en el Selectivo Estatal.
“Mi mamá me metió al agua y cuando termino la prueba me dicen: “diste el tiempo para ir al Campeonato Nacional en Michoacán y me emocioné mucho, pero en eso, se acercó el médico (que la atendió en convalecencia) y dijo: “perdóneme por no haber luchado antes, hoy le prometo que siempre voy a luchar por mis pacientes””.
Mientras el médico cambió su perspectiva de la vida y lucha de quienes convalecen, Nelly viajó a Michoacan y en su primer Campeonato Nacional de Para Natación ganó cuatro preseas: dos oros y dos platas.
Parecía que Nelly empezaba a dominar esta nueva etapa de su vida, cuando con el uso de una órtesis cuya meta era ayudarla a caminar de nuevo, le causó otra adversidad: entró en hipoxia por cinco minutos, que le causó muerte clínica y un coma inducido…pero regresó a la vida, en condiciones aún más delicadas.
“No podía hablar, porque había quedado con una embolia. Solo balbuceaba y como podía yo le explicaba a mi mamá y a mi hijo que yo quería luchar y salir adelante, o intentarlo al menos para ver si mi cuerpo reaccionaba”.
Así iniciaron terapias desde la mañana hasta la noche. Un trajín que parecía eterno, pero que religiosamente hacía Nelly, acompañada de su mamá y de una convicción infinita.
“A veces te das cuenta que el rival más fuerte que puedes tener, es uno mismo”, asegura la deportista.
Al cumplir el proceso, Nelly estaba lista para regresar a las aguas y vivir sus primeros Juegos Parapanamericanos en Río de Janeiro, donde ganó plata en 200m libres categoría S4; un año después, llegó a los Juegos Paralímpicos de Beijing 2008, donde ganó dos preseas de oro en los 50m y 1000m libres (categoría S4); en la primera prueba dejó su nombre en el nuevo récord mundial: 46.27s.
Ese año ganó el Premio Nacional de Deportes y al año siguiente el Premio Estatal del Deporte, en su querido Veracruz.
Nelly trabajó aún más duro y la cosecha fue ganar oro en los Juegos Parapanamericanos de Toronto 2015; al año siguiente, en los Paralímpicos de Río 2016, ganó bronce en los 50m pecho SB3.
El brillo de Nelly ya era mundial, pero de nueva cuenta, sigilosa y expectante yacía una desventura más en su vida: en 2018, cuando ya consideraba el retiro del deporte, convulsionó y entró a quirófano para una cirugía que le evitara perder la movilidad en los brazos. Lo que tomaría seis meses se volvió una agonía, pues en plena recuperación, tuvo de nueva cuenta convulsiones y la debieron inducir al coma.
Un episodio que le arrebató tres años de su vida en el deporte pero, tan pronto pudo, regresó a nadar, clasificó a los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020 (realizados en 2021) y ganó bronce en los 50m pecho S4.
“La medalla de Tokio me sabe diferente a todas porque Dios me permitió disfrutarla, por eso en el podio, se la dediqué a Dios por darme esa oportunidad de regresar”.
Y parece que el regreso era más prolongado de lo que imaginaba. En la Serie Mundial de Para Natación 2023 de Tijuana, Baja California, Nelly ganó medallas de oro en 50m pecho (1:03.87) y bronce en 50m dorso (58.15), además de mejorar su crono personal en los 50m libres (41.97s).
“No puedes vencer a alguien que nunca se ha rendido y hoy sé que cada vez que algo sucede, me fortalezco más; por eso me gustaría que el día de mi retiro me recuerden como una persona que no se puede derrotar”, pidió una Nelly que en tres ocasiones ha estado al borde del último aliento y ha sido esa bocanada la que cada vez la ha probado como Nelly ‘La Invencible’ Miranda.
NELLY EDITH MIRANDA HERRERA
Fecha de nacimiento: 2 de agosto de 1972
Lugar de Nacimiento: Puebla,
Lugar donde radica: Veracruz
Deporte: Natación
Título: Licenciada en Administración
Logros: Cuatro veces medallista en Juegos Paralímpicos. Ganadora del Premio Nacional de Deportes 2008 y diputada suplente por el Distrito 12 de Veracruz, hasta 2012.
